Pues que creen, les cuento
mi triste historia, resulta que no pude completar mi semana alimentándome de
esta manera (obvio, solo iba con la bendición de los dioses) al quinto día casi
me desmayo porque mi cuerpo opino diferente que mis ideales. Afortunadamente me
pasó antes de ir al gimnasio, así que no corrí peligro de lastimarme.
Pues, nada, me sirvió como
experiencia para futuras ocasiones en las que quiera hacer algo desintoxicante
para mi cuerpo. Todo el día estuve mal, me sentí muy débil y tuve mareos y pérdida
de la visión.
Pero nada grave, al final
regrese a solo ser vegana y asunto arreglado, aunque aun así vi algunos
beneficios en mi cuerpo, como desinflamación de la panza (esa contra la que
tanto lucho) y me sentía muy digestiva, no sé cómo explicarlo, ya saben, como que
todo me fluía, y eso que siendo vegan nunca he tenido problemas de estreñimiento
ni nada de eso.
También, pude apreciar el
sabor de las frutas y verduras en su totalidad ya que no iban acompañadas de
nada, y era maravilloso reconocer sabores. La siguiente vez buscare asesorarme
antes de andar experimentando.
Por otra parte también me sentí
más en el ojo del huracán respecto a las críticas, ya saben, ser vegan es
criticado y crudi, casi pedía crucifixión a gritos. Pero estoy bien no se
preocupen, mi salud regreso a lo normal.
Ser crudi, me hizo que me
diera cuenta de que sentimos muchas veces que es obligación comer verduras y
que no saben buenas o que sin aderezos, chile o sal va a saber desabridas, pero
la realidad es muy diferente, sabe realmente bien mezclar frutas y verduras, el
aguacate va con todo y verduras y frutas no ocupan nada para saber bien.
Ahora buscare alimentarme
mejor de lo que antes lo hacía.
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