16 de marzo de 2019

El autoestima de las chichis.




Bueno es un tema común entre mujeres, el tamaño, forma y aspecto de los senos, van directamente a la autoestima y a cómo te juzgan otras mujeres. No sé, es algo social me imagino, siempre está el tema de sin chichis no hay paraíso, haciendo referencias de que el aspecto de esta parte del cuerpo hace que las mujeres sean más o menos atractivas.


Y yo les digo en mi experiencia si han sido un drama en mi vida personal, todo se remonta al final de mi niñez donde yo era insegura ante mis cambios físicos y un tipo me hizo un comentario sobre mis pechos, obviamente lo hizo con malicia, y yo era demasiado joven e inocente, por lo tanto me impresiono mucho. El desarrollo de mis senos comenzó pronto pero se pauso mucho tiempo, es decir se me notaron un poco a eso de los 12 y se mantuvieron en ese tamaño o casi, hasta los 15 años.


Al principio use corpiños, ahora llamados bralettes, pero me parecían incomodos y en mi afán por sentir que ‘era mujer’ comencé a usar brasieres con varillas y ni al caso porque no tenía casi senos, pero el punto era parecer que sí y pertenecer al grupo obvio. Después debido a mis problemas de peso subí de grasa en el área del pecho y por fin pude ‘llenar’ una copa de brasier, aun así compraba una talla más de la que necesitaba y no por querer aparentar sino porque estaba ancha de espalda y la copa viene grande, los fabricantes no piensan que uno puede estar gorda y sin chichis.


Así dure otros años de mi vida, nunca pensé seriamente en hacerme cirugía estética para agrandar mi busto, pero sin duda vivía con ansiedades sociales sobre mi aspecto. Cuando comencé mi camino al fitness que me lleno de seguridad, lo tengo que decir, pues mi visión de belleza cambio y mis senos dejaron de ser una preocupación constante, también al bajar drásticamente de peso, mis pechos ‘se fueron’ regrese a usar corpiños, y esto por fin, después de tantos años ya no me importo.


Fue un lago camino y una lucha personal y social para aceptar mis senos, pero ahora después de tanto puedo decir que estoy bastante conforme, es más, me agrada mucho el casi no tener, realmente no vivo pensando en eso ni en cómo se ven, a veces sé que hay ropa que no se me ve bien porque no lleno esa parte, pero no me importa siempre busco una prenda que me favorezca más y listo.


Y para aclarar, cada cual hace con su cuerpo y aspecto lo que le viene en gana, yo les digo solo mi opinión, hay quienes si se someten a cirugías costosas, riesgosas y dolorosas por cambiar ese aspecto que tanto les incomoda y cada quien es libre de hacerlo. En lo personal no lo hice, y no lo haría y en parte me parece un poco triste que haya personas que recurran a eso para estar bien con su cuerpo, porque en mi personal opinión que no afecte nada, digo que no hay nada más hermoso que estar feliz con el cuerpo que uno tiene, es decir que tu autoestima llegue tan arriba que todo en tu cuerpo te guste.


Mas no estoy diciendo que estoy en contra de que la gente se opere los senos, eso depende de cada persona, solo pienso que es hermoso aceptarse, pero no es una regla general, es solo mi opinión, y no es que yo sea perfecta, para nada me ha costado mucho llegar a la aceptación que tengo. Además puede haber muchos motivos para una cirugía estética y cada cual tiene derecho a decidir que quiere y como lo quiere.


Yo por mi parte busco sentirme bien con mi cuerpo en cada etapa de mi vida, no siempre lo logro o no siempre es constante, pero pues sigo en ello, como sigue mi vida.

Ayuno intermitente parte dos




Desde finales del año pasado he vuelto a practicar el ayuno intermitente, ahora si consiente de lo que estoy haciendo, informada por todos los medios que me ha sido posible, y aún falta, claro, uno siempre está en constante cambio y cada tipo de alimentación, con el tiempo y estudios se descubren más cosas.

Ustedes saben que cuando algo me convence yo lo hago al momento, a veces claro sin saber, pero siempre he sido así, total, que cuando conocí el ayuno intermitente y descubrí que algún tiempo lo practique sin saber, pero ahora sí, informada de muchas cosas, pues me dije, es tiempo. Y comencé a mediados del mes de diciembre del 2018, más que nada viendo los beneficios que menciona y porque ya quería un cambio en mi vida.


Todo esto es por mi camino del fitness, he tenido altibajos, después de bajar tanto de peso, que era mi principal objetivo, comencé a tener más objetivos, mejorar mi técnica, tener más fuerza, tener músculos, etc., bien, dentro de esto mi peso ha subido, he llevado diferentes alimentaciones y cambiado muchas cosas, como les había comentado, reduje drásticamente los alimentos procesados, esto tuvo notables cambios, pese a que me sentía bien con mi alimentación basada en plantas, cuando deje las comidas procesadas me desintoxique de los azucares añadidos.


El ayuno que practico es de 8/16 es decir durante 8 horas está abierta mi ventana alimenticia y en esas ocho horas están programadas mis comidas, es decir mi desayuno, merienda, comida y cena.

Al comienzo de este ayuno tuve muchas ansiedades de no tener suficiente tiempo para comer, obviamente cuando haces un cambio así de rápido y dramático como yo lo hice, pues no me llenaba, pasaba algo de hambre, pero no del hambre que te mata, solo de la que eres consciente de tener. Y también es como todo, no hay cambios drásticos en los primeros meses, es decir puedes llevar unas 6 semanas y tu peso y grasa corporal sigue siendo la misma, esto se debe a que el cuerpo se va adaptando, y claro que le lleva su tiempo adaptarse a una nueva dieta.


No es tanto una dieta, es más que nada un horario para comer, en mi caso si va acompañado de un plan alimenticio, pero no necesariamente la gente que lo practica lo hace así. Ya saben a cada persona le funcionan diferentes cosas. Ya después de tiempo, baje de peso, no como la primera vez que fueron 25 kilos, no, pero si baje de peso, estaba en 66.900 y estoy en 60.500 kilos.


Ahora bien, los cambios que he tenido, unos son de peso, y otros son de cómo me he sentido, pues después de pasar algo de hambres y ansiedades, me sentí bien, así tal cual se puede decir, en las horas de ayuno que estoy despierta realmente con tomar té sin azúcar, café puro, o agua, me siento tranquila, me deja tiempo para hacer cosas sin pensar en comida. Por otra parte, mi rendimiento físico ha sido prácticamente igual, porque en mis horas de alimentación, también entreno, así que no ha sido diferente.


Otros cambios han sido emocionales, siempre he tenido una fuerte relación con la comida, es mi consuelo en muchos casos y también un castigo y en fin, he pasado por mucho, y haciendo ayuno lo que noto, es que la primer comida que hago me sabe a gloria, sea lo que sea, es como si mi cuerpo despertara, es decir, despierto desde que me tomo mi vaso de agua, te o café, activo mi ser y me pongo hacer actividades, pero, es diferente al comer por primera vez.


Los primeros bocados me hacen sentir inmediatamente feliz, cosa que no me pasa cuando no llevo a cabo esta alimentación por horarios, otro cambio fue que al bajar un poco de peso mis piernas se llenaron de celulitis y eso que tomo la misma cantidad de agua, pero sé que hay muchos factores para eso no solo bajar de peso, igual que mi piel abdominal que esta algo floja, por lo mismo, al bajar la grasa queda floja y claro con el tiempo se regresa a su lugar, pero vamos, no lo hará en el momento.


Y el último cambio que he notado, es que mis senos de nuevo están más pequeños, no es que hayan acumulado grasa antes, es decir cuando estaba en 66 kilos, pero yo los notaba de cierto tamaño y ahora con apenas 6 kilos de diferencia siento que si perdieron consistencia, me imagino que es la grasa.


Espero les sirva mi experiencia en el ayuno para darse una idea de lo que es y para que lo hago yo, mas no les digo que es la única forma de bajar de peso o mantenerse en él, cada cuerpo es diferente y por lo tanto le funcionan cosas diferentes.


Ayuno intermitente parte uno




Hace algunos años practique este tipo de alimentación, básicamente es poner un horario para comer y solo alimentarse dentro de ese horario. Una vez explicado esto, cuando yo lo hice realmente no sabía que se llamaba de alguna manera o que era un método efectivo para bajar de peso, controlar el peso, el apetito, la glucosa en sangre, etc.


Yo únicamente lo hice saltándome el desayuno y la cena, comenzaba a comer a las 12 del día y mi última comida era a las 6 de la tarde, los primeros meses que lo hice no observe cambios notables en mi peso, ya hacia ejercicio, por ese entonces el crossfit era mi vida, pero apenas iniciaba mi camino del ejercicio, tenía 26 años, baja autoestima y sobre peso, para ponerlos en contexto. Después de casi 3 meses de realizar el ayuno sin saberlo ni planearlo, baje de peso, un poco, no todo lo que esperaba pero era esperanzador.


Aclaro que cuando hice este ayuno estaba totalmente desinformada sobre la manera correcta de llevarlo a cabo y consumía muchos productos procesado que hoy puedo decir orgullosa que ya deje, les decía, el caso es que yo reduje mis horas de comer y la cantidad que me servía, aun así abusaba de los carbohidratos para sentirme saciada. A los 6 meses el cambio se volvió una forma de vida, cada mes bajaba 5 kilos y fue hasta cierto punto alarmante.


De pesar 80 kilos baje hasta 55, fue un cambio drástico y radical en mi apariencia, mucha gente que estaba por entonces en mi vida me lo hizo notar y mi autoestima subió a niveles impresionantes, dure unos 4 meses en ese peso hasta que de pronto mi imagen física ya no me gustó tanto, no es que volviera el baja autoestima, es que sentía que se me veían mucho los huesos, así que interrumpo mi ayuno, comencé a desayunar de nuevo y solo saltarme la cena, así dure otro tiempo más y finalmente deje el ayuno.


Ahora bien, al practicarlo sin saber, obviamente cometí muchos errores, para empezar la desinformación, también tuve consecuencias como bajas las defensas y ansiedad por comer, pero dentro de todo realmente no me fue tan mal. Quisiera que si ustedes alguna vez quieren llevar a cabo el ayuno intermitente primero que nada se informen correctamente, he visto que el ayuno no es para todos, no siempre logra los efectos deseados y como todo hay que  tener paciencia.

Primer trimestre




Año nuevo no significa nueva yo.


Este año ha comenzado con una considerable mejora en mi vida económica, por una parte esto hace que me sienta muy tranquila, pues la estabilidad económica siempre es importante para sentirse bien en muchos aspectos además de saber que puedes mejorar tu calidad de vida en muchos aspectos.


No les había contado porque no era oficial, pero al fin encontré un trabajo que me deja vivir, es decir, ya saben que estoy en contra total de que el trabajo absorba todo tu tiempo y prácticamente seas esclavo del sistema, pues bien en mi lucha incansable, casi de pura suerte he encontrado un nuevo trabajo, soy auxiliar educativo de preescolar. Esto por supuesto que es un cambio muy drástico en mi vida, pues ni siquiera estudie ninguna rama acercada a esto, pero se me presento la oportunidad y la tome sin pensar demasiado.


Soy de las personas que siempre dicen que no se llevan bien con los niños y que al no tener paciencia pues definitivo no se me daría cuidarlos, y menos se diga educarlos, pues este año se ha puesto a prueba todas mis teorías que daba por sentadas y para mi sorpresa me ha encantado ser maestra, me ha parecido una experiencia totalmente hermosa, reconfortante y diferente.


Estudie administración, sin pensar demasiado, buscaba un campo amplio laboral, y la verdad es que si hay muchos trabajos en los que me puedo desempeñar con esta carrera, pronto encontré trabajos que eran medianamente bien pagados y que cumplían con ser parte de lo que estudie, pero no me llenaban el alma, realmente me sentía presa en empleos sin futuro.


No me mal entiendan, ame estudiar, por primera vez aprecie el hecho de aprender y disfrute el proceso, mi carrera no fue tan pesada y los tres años fueron maravillosos, pero una vez aplicada al mundo real, yo no encontraba un lugar adecuado para mí, busque diferentes campos en los cuales desarrollarme pero no encontraba alguno en el que yo sintiera que podía aportar algo y que me dejaran el tiempo para disfrutar mi vida.


Así que maestra de preescolar, vaya, quien lo diría, ni siquiera yo hubiera apostado por eso, pero así es, actualmente mi trabajo me permite por completo llevar a cabo todas mis demás actividades y siento que aporto algo, hago que niños aprendan a leer, escribir, expresarse, y muchísimas cosas que jamás imagine que estuvieran involucrada en el desarrollo del ser humano.


Cambiando de tema, en este año prometí ocuparme realmente de mi salud, ustedes saben que soy vegana por ética, y mucho tiempo deje de lado mi alimentación, como casi todas las personas, veganas o no, uno simplemente come lo que está acostumbrado y lo que sabe bien sin pensar si estos alimentos nutren o significan algo para el cuerpo, pues bien, de pronto sentí la necesidad de ponerle total atención a mi salud. Así que comencé el año informándome, estudiando sobre todo lo relacionado con la salud.


Decidí llevar no solo una alimentación vegana por ética, sino también incluir la salud, por ello al saber sobre todos los alimentos procesados que consumía, sobre el azúcar al que era adicta, sobre la cantidad de químicos que contiene la comida comprada, cambie muchos aspectos de ello. Deje la tan adorada cátsup que tanto consumí en toda mi vida, deje las galletas, deje el pan de barra, deje los dulces, y créanme eso si fue duro, pero en mi camino siguen los ajustes, ahora veo que quiero nutrirme, que es parte de amarme y por lo tanto cuidar de mi salud se ha vuelto parte de mi día a día.


En otros aspectos ya cumplí 29 años y me sentí bien con ello, mientras en años pasados vivía estresada con pensar en mi edad, ahora decidí que no viviría así, por ello felizmente dije mi edad y me sentí contenta con tener esos años, pues todo lo que he hecho me ha costado 29 años, no tiene sentido negarlos, no tiene sentido arrepentirme de ellos o avergonzarme, al contrario que hermosos tantos años que me han hecho cambiar madurar, llorar, ajustarme y todo lo demás.


Y para terminar este resumen de mi primer trimestre de año, sigo en mi camino al fitness, aun entreno de manera constante y me siento muy feliz de continuar así, este año ya cumpliré 4 años dedicándole mucho tiempo a las pesas y me alegra mucho haber sido constante en este hecho.

Espero su año haya comenzado maravillosamente como el mío.


22 de diciembre de 2018

Comida




Siempre he tenido problemas con ella, al principio fue que caí en las adicciones de los químicos añadidos, alimentos procesados que supuestamente te nutren y obviamente en la mercadotecnia, en el sabor falso que altera el cuerpo y todo lo que la gente come. Después me aleje de eso hacia otros derroteros también nada saludables, uno de ellos fue reducir considerablemente mis alimentos para lograr cambios estéticos.


La comida era el enemigo, yo no podía entender porque todo lo que sabía tan bien me hacía tanto daño, y engordar de manera extremadamente rápida, pensaba que debía alimentarme según lo que mi paladar gustara, porque según yo, era la fiel brújula y guía para mi existir.

Error tremendo, del cual nunca estuve informada, inocente criatura que era víctima de los saborizantes artificiales y todas las azucares conocidas por el hombre, realmente vivía tan drogada con todo ello, que no me daba cuenta que estaba cegada. Hasta que la bendita información llego a mí, para comenzar fue hacerme vegana, pero una cosa es el veganismo y otra la salud, después enterarme de eran realmente todos los ingredientes que venían en las etiquetas de los productos que consumía diariamente, y como consecuencia de ello horrorizarme sabiendo que le metía a mi cuerpo.


No es que ahora ya no coma nada procesado ni con químicos añadidos, no tampoco he llegado a ese bello punto, un día, pero si he sido mucho más consiente de todo lo que como. Y de los efectos que tiene en mi cuerpo, por ello para mi es fundamental leer, aprender, buscar y poner atención a todo, poco a poco me he ido quitando las cosas que hacen daño, reduciendo otras y así.


El proceso ha sido largo, bueno relativamente porque apenas llevo como unos ocho meses buscando mejor alimentación, antes solo buscaba no excederme en cuanto a grasa o cantidad de alimentos, pero nada más, y ahora busco comer más natural es decir librarme de lo procesado en cuanto me sea posible, y que la comida no sea el enemigo.


A veces sí y a veces no.





Bueno tengo un rato un tanto alejada de lo espiritual, ya saben la meditación y esos libros que me inspiran a ser mejor persona, no es que los haya abandonado o que deliberadamente dejara de creer en ellos, solo es que tome mi vida del presente y al tener problemas deje que me abrumaran, es todo.


Por otra parte sigo con la corriente del minimalismo, busco desapego emocional por los bienes materiales, no digo que no compro nada o que ya soy hippie viviendo en comuna, pero si reduje considerablemente mis compras mensuales de bienes y busco tener cosas útiles más que de adorno. No digo que de eso se trate el minimalismo, he visto que no tiene nada que ver con pobreza, pero yo en parte si lo busco, solo pobreza de bienes materiales.
Cumplí mis cuatro meses de no comprarme ropa, únicamente compre un par de prendas que requería con urgencia pero no fue compras por placer como toda mi vida hice. Y aunque al principio fue largo el tiempo y mucha la espera al final realmente no sentía presión por comprar nada. Me di cuenta que no lo necesitaba y que me sentía bien así.


Me empecé a vestir con ropa básica de colores neutros, combinables y con muy pocas prendas, en general me veía igual todas las semanas, pero eso es comodidad, no batallar buscando combinaciones nuevas ni nada por el estilo. Fue reconfortante saber que mi autoestima no dependía de mi forma de vestir que me sentí realizada y orgullosa de mí. Por otra parte busque tener los menos accesorios posibles y la ropa menos llamativa.


Esto no fue por sentirme mal o menos moralmente, fue únicamente para concentrarme en otras cosas, y resulto muy beneficioso, ya no más fotos de mi con atuendos y cero estrés por comprar o nuevos estilismos de moda. Me he sentido muy feliz y tranquila, cosa que no creí posible. Aún hay presión social por “arreglarme” pero no es algo que no pueda manejar.


En mi hogar he buscado tener comodidades pero no adornos, y no cosas innecesarias algo que se ha notado, mi pareja no tiene problema con mi forma de pensar aunque no comparte todo, yo respeto que él tenga sus cosas y que si compre objetos. Busco que eso no tenga que ver conmigo, es decir son sus decisiones y yo tengo las mías.


Otra cosa en la que sigo avanzando es en la alimentación, si bien he llevado dietas por determinados tiempos para lograr objetivos, ahora estoy en otro enfoque, en alimentación sana no por un tiempo o por lograr un objetivo, sino por nutrirme de por vida. Es muy distinto a lo que antes hacía, porque siempre sabía que esa dieta o periodo terminaría y podría volver a comer todo aquello que quisiera, pero ahora me doy cuenta de que esto no es algo que yo busque por un tiempo determinado, sino una manera de vivir todo el tiempo.
he leído, para aprender, he buscado información que pueda aplicar y la realidad es que es muy fácil, la cosa es que no siempre llevarlo a cabo es tan fácil como comprenderlo. Para comenzar esta la sociedad acostumbrada a comer tan mal y para aliviar todos los males emocionales que resulta extraño querer comer bien. En lugar de conseguir apoyo de todos los que me rodean me ven como una extremista.


No considero que alimentarse sanamente sea algo que me haga una persona extremista, pero si me he encontrado con esos comentarios, que comer tal cosa una vez de vez en cuando no me va a matar, pero no se trata de eso, sino de que yo elijo alimentarme correctamente, no restrinjo nada, no me privo de nada, es normal privarse de lo que hace daño, y al saber que muchos considerados alimentos en realidad dañan el cuerpo, elijo no comerlos.


Para mi es simple, pero para el mundo que me rodea no lo es. En general siendo vegana ya me acostumbre a llevar mi comida a todas partes y así, pero ahora que doy un paso más hacia la salud y bienestar, es como si yo sola me complicara más las cosas, porque las personas piensan que con que me lleven alimentos que no son de origen animal ya me los voy a comer, y la realidad es que son procesados llenos de químicos y también los he dejado.


Aun me queda mucho por aprender y mejorar todo yo lo sé, pero a veces se me hace complicado tener que explicárselo a los demás, o siempre parezco la persona que no quiere convivir a la hora de la comida. Pero yo sé que no se trata de eso, sino de que vivo distinto es todo. Espero seguir por este camino y cada vez aprender mejor la manera más saludable de alimentar mi cuerpo.



Un largo tiempo.



Resulta que ser adulto no siempre es tan padre como uno imagina de adolescente o niño, si bien parece que tiene uno libertades exageradas y que puedes hacer tantas cosas, la realidad es que vivimos en un mundo lleno de reglas y obligaciones que se adquieren al crecer.


Al principio de mi adultez, disfrute mucho la sensación de libertad y de poder hacer tantas cosas nuevas e interesantes, pero ahora que ha pasado el tiempo a veces no es tan divertido, me doy cuenta de que tengo que hacer tantas cosas que no quiero, de ser responsable por mi vida y hacerme cargo de la situación. No digo que todo sea malo o que la vida me haya tratado mal, pero si tiene momentos duros que uno debe sobreponerse y salir adelante, ya como adulto.


Pues bien, hace un tiempo tuve problemas económicos fuertes, y aunque practico el desapego por lo material, no niego que mi sustento básico es algo que debo tener siempre para tener seguridad, y hasta este se puso en riesgo, considerando que busco reducir al mínimo el dinero que necesito para subsistir. Esto nunca me había pasado, no es que yo tuviera demasiadas posibilidades, pero no había llegado el momento en que batallara tanto.
Y sucedió, al comienzo de todo yo estuve tranquila pensando que de una u otra forma pronto tendrían solución mis penas económicas, pero conforme fue pasando el tiempo y no se solucionaban el estrés fue haciéndose presente. Comenzó con inquietudes a la hora de dormir y después un mal humor recurrente que ni yo conocía. Ya al final sentía pesadumbre en el cuerpo, y aunque trate de hacer mi vida con normalidad y esperar pronto la solución, no tuve paz hasta que el problema se arregló.


Vivo con mi pareja y yo creía haber tenido toda clase de problemas en pareja, pero realmente no, la vida aún tiene primeras veces para todo, y tener penas económicas fue una de tantas cosas que aún me quedaban por experimentar. Ahí fue cuando más eche de menos ser adolescente y no tener que preocuparme por todas esas cosas de adultos. Me doy cuenta de lo rápido que pasa el tiempo y de la mucha responsabilidad que tengo.


Por ahora ya paso esa etapa, una más de aprendizaje como pareja y a nivel personal. La vida nunca acaba de enseñarnos.




La vida godinez


Godinez son todas aquellas personas que con carrera o no, trabajan en las oficinas de diversas empresas haciendo trámites y haciendo que el mundo de los negocios siga como siempre. Es la vida que muchos se acostumbran y les da bienestar y felicidad. La carrera que estudie va dirigida a eso, a entrar en ese mundo y ser parte de el, claro la carrera ayuda a saltarse algunos niveles y no empezar desde abajo siendo obrero u operador.


Pero si de algo me he dado cuenta es de que no es para mí, ver el mundo de los negocios desde ese punto, donde eres una pieza más de todo el engranaje para hacer funcionar un negocio, no es algo que me haya agradado, dejando de lado mi libertad que valoro mucho, me doy cuenta que siento que en realidad no estoy aportando nada a mi vida.


Dinero, claro ese sí, pero no realmente a la vida que me gusta tener, es decir, no es satisfactorio, me han dicho que uno no lo puede tener todo, es verdad coincido, pero si se trata de sacrificar cosas, pienso que estar encerrada en una oficina nada más haciendo cosas que no me parecen que aporten nada a mi vida,  no es algo que alimente mi alma.


Hace poco tuve la oportunidad de radicalmente cambiar de aires, ver cosas que jamás pensé, comencé a ser auxiliar de maestra de preescolar, cosa tan distinta que ni se cómo es que termine allí. El punto es que ha sido tan abismalmente diferente que es como si fuera otro mundo o yo otra persona. Ni siquiera se ha sentido como un trabajo.


Es decir estaba acostumbrada totalmente a horarios rutinas aburridas que mataban mis sueños, trabajo con adultos, ser un adulto y cosas tan malas y aburridas que esto no tiene nada que ver. Enseñar a los pequeñines las primeras cosas básicas de la vida en sociedad ha sido la mejor cosa que me ha pasado laboralmente hablando. Es tan distinto que no se compara, pasar mis días recortando para hacer manualidades, llena de mocos y pipi, hasta parece locura.


Me ha encantado verdaderamente enseñar a los niños las bases para aprender a convivir, y eso que siempre dije que no tenía paciencia y menos para los niños que lo preguntan todo. Pero en la práctica ha sido muy diferente mi reacción. Quien sabe, mi vocación escondida tal vez. Pero me ha sentado de maravilla estar rodeada de personitas que tienen toda la inocencia e ilusión del mundo. Me llena de fe y alegría.


Es como si ellos me enseñaran a mí a vivir en lugar de yo a ellos. Créame que nunca lo hubiera imaginado, a veces tan rara y oscura como soy, me lleno de luz con ver esas caritas dulces cada día.

Ahora sé que realmente aporto algo, y no soy solo parte de una mínima cosa que produce dinero para una persona avara, sino estoy aportando enseñanza a un pequeñín que comienza su vida, está aprendiendo a comportarse a seguir instrucciones a formarse como persona, no se es tan indescriptiblemente hermoso.


Veo el progreso de una persona en potencia, es algo que no tiene precio, ni siquiera lo hago por el dinero, que realmente no es la gran paga, lo hago por amor al arte prácticamente, me pagan por ayudarlos a crecer pero no me pagan extra por quererlos y cuidarlos y eso lo hago de corazón. No se, ha de ser que no estudie esa carrera y no lo hago con el enfoque que debo, pero igual funciona para mi y para la escuela.


Así que les comparto mi pedazo de cielo, al fin encontré un empleo que no me gusta, me encanta y que disfruto muchísimo en realizar. Y me siento afortunada de haberlo encontrado porque tan pesimista que soy, realmente aseguraba no encontrarlo nunca.


Ojala todos puedan encontrar ese empleo que les guste y les deje cosas espirituales bonitas y aparte les deje el tiempo de tener su vida llena de todas las demás cosas que la componen.




27 de agosto de 2018

Experimento social


La imagen puede contener: Daphne Alvares, de pie y gafas


Como saben últimamente me metí en el minimalismo, no de lleno, pero si he tomado el concepto y lo he adaptado en mi vida, lo primero fue deshacerme de toda la ropa y calzado que realmente no uso, fue extenuante limpiar el armario. Después decidí que debía ir reduciendo cada vez más la ropa que uso, pese a que aún me gusta la ropa, pensé que sería bueno dejar de darle tanta importancia a la apariencia.


Por ello aparte de tener pocas prendas para vestir, únicamente las que considere necesarias, también busque no complicar mi vestuario con accesorios ni hacerlo llamativo, únicamente cómodo que cumpliera con la función de cubrir mi cuerpo del exterior. Esto con el propósito de observar si mis amistades cercanas se darían cuenta de que uso prácticamente lo mismo y también por mí misma.


Para buscar sentirme cómoda con mi apariencia sin que me importase no traer ropa llamativa, pues en el pasado si le daba demasiada importancia a mi aspecto, sentía que la ropa era parte de mi cuerpo y personalidad (así como el maquillaje) por ello es que es un reto personal sentirme bien con lo que lleve puesto.


Bueno el caso es que ha funcionado de maravilla, siento que ahora si le doy más importancia a lo que soy por dentro, a como pienso a mis valores, y nada ha interferido con lo que traigo puesto. Por otra parte ha disminuido de manera considerable mi crítica y juicio hacia la apariencia y vestimenta de otras personas, es como si cada vez me fijara menos en eso.


Me he sentido muy cómoda usando la ropa que me queda y combinarla es fácil dado que son colores sólidos y muy pocos, no pierdo tiempo pensando en que ponerme y mi autoestima no se vio afectada por mi apariencia distinta. Es como si todo se juntara, tengo poca ropa, repito la ropa constantemente, me fijo muy poco en ello, deje en gran medida lo superficial, no gasto en ello, critico menos, la comodidad es lo mejor y me siento bien.


Aunado a que no uso maquillaje y no depilo mis axilas, es algo muy liberador, vi de otro modo la famosa “feminidad” porque no siento que sea menos mujer que aquella que usa de todo y con maquillaje o artilugios cambia su aspecto físico, no me sentí incomoda de pensar que otra gente pudiera criticarme, al contrario, el dejar todo eso fuera de mis constantes pensamientos, me dejo tiempo libre para reflexionar sobre ello y sobre como crecemos con este concepto de que ser femenina es cambiar tu apariencia física y siempre lucir como en realidad no eres.


Que felicidad verme al espejo y sentirme hermosa tal cual soy sin ver mi ropa y pensar que es ella la que me hace bella, que bonito que en la calle despierte interés por parte de las personas sin tener nada falso que quitarme.


Ojala las personas se valoraran más y se dieran cuenta que la ropa no debe ser la que te defina y que el maquillaje es opcional que no se necesita toda esa producción para hacer lucir bien a alguien o darle un valor moral, que ya en si tiene.

Conducta femenina y conducta masculina.




Hace un tiempo llevo pensando sobre este tema. Para mi es importante ir avanzando en el pensamiento, abrirme a posibilidades nuevas, esto incluye dejar el pensamiento de “conductas femeninas” son todas estas que nos van ensenando en la cultura, tales como: “pórtate como una dama” que hace referencia a conductas determinadas, que son distintas a las de los varones.


Pienso que la igualdad debe ser el principal motivo de remover toda esta enseñanza de conductas separadas. Nuestro sexo no cambia a lo largo de nuestra vida, siempre seremos hombres o mujeres (sin discriminar a los que son ambos géneros) pero la sociedad marca la diferencia con la educación que se nos da. Antes he hablado de ello y de que me molesta la desigualdad o el machismo y hasta el feminismo. Creo que no deben existir tales posturas, solo la de la igualdad.


He visto que la sociedad conformada por mujeres ha exigido que se cambien leyes para buscar igualdad de derechos pero también he visto manifestaciones de conductas que repruebo totalmente por que caen en lo mismo que el machismo, es decir hacer ver que un determinado sexo es mejor que el otro y que debe y puede aprovecharse de ello.


Eso para mí es totalmente inaceptable. Yo propongo igualdad de oportunidades y esto tiene mucho que ver con la manera en que nos educan. No me parece bien que se tengan diferentes parámetros educacionales para hombres y para mujeres. Los hombres no tienen por qué tener solo las conductas marcadas para ellos, e igualmente con las mujeres.


Me enoja de sobre manera cuando escucho comentarios si un hombre es cuidadoso de su aspecto físico o acicalado, que digan que eso es de mujeres o que le cambia la orientación sexual, o que desvaloriza su condición de hombre. Es totalmente idiota. Creo de manera contundente que no deben existir las conductas propias de un género, estoy segura que son meras invenciones del ser humano en sociedad, son normativas aprendidas.


Lo saco a conclusión de manera empírica, viendo a los niños muy pequeños que al no estar adoctrinados aun (claro que los padres desde muy temprana edad les inculcan estas pendejadas de: “no llores porque eres niño” de “no juegues brusco con la niña porque la vas a lastimar”, o de “tú no puedes jugar brincando porque usas vestido”) son muy libres de expresarse tal cual, y no tienen a mi parecer una conducta de hombre o de mujer, se comportan como seres humanos, es todo.


Así que siendo ya adultos estamos adoctrinados malamente, a solo comportarnos según los cánones inventados para nuestro sexo. Y yo me opongo, debemos comportarnos con valores, con moral y con ética, sin importar que seamos hombres o mujeres.


Toda esa estupidez de conductas que igualmente abarca el ser caballero de lo cual hable anteriormente, me parece que ha llegado a su fin y debemos evolucionar como sociedad. Dejando de imponer estas normas culturales que únicamente crean desacuerdos.


Sé que no es fácil erradicar esta educación que se ha llevado por muchísimo tiempo, pero sé que por algo se empieza, primero que nada dejar de pensar que los niños y niñas deben jugar separadamente, y no los mismos juegos, también dejar atrás todo eso de sentir admiración por conductas de ridícula caballerosidad donde en realidad solo hacen ver que la mujer no es capaz de valerse por si misma y que el hombre tiene el deber de ayudarla. Nada de eso es aplaudible. Hacemos a las mujeres inútiles y que esperen esa ayuda siempre de un hombre.


No me gusta que a las niñas se les prive de vivir una vida normal y se les imponga que deben comportase con ademanes según delicados y discretos porque son mujeres, eso no debe seguir pasando, tenemos que avanzar como personas para cambiar como sociedad, por ello debemos quitar todo eso.


Aun no sé qué tanto debe abarcar, aun pienso en ello, pero considero que es un buen inicio quitar de mi cabeza el decir comportamiento femenino y masculino y comenzar por decir comportamiento humano.