27 de agosto de 2018

Experimento social


La imagen puede contener: Daphne Alvares, de pie y gafas


Como saben últimamente me metí en el minimalismo, no de lleno, pero si he tomado el concepto y lo he adaptado en mi vida, lo primero fue deshacerme de toda la ropa y calzado que realmente no uso, fue extenuante limpiar el armario. Después decidí que debía ir reduciendo cada vez más la ropa que uso, pese a que aún me gusta la ropa, pensé que sería bueno dejar de darle tanta importancia a la apariencia.


Por ello aparte de tener pocas prendas para vestir, únicamente las que considere necesarias, también busque no complicar mi vestuario con accesorios ni hacerlo llamativo, únicamente cómodo que cumpliera con la función de cubrir mi cuerpo del exterior. Esto con el propósito de observar si mis amistades cercanas se darían cuenta de que uso prácticamente lo mismo y también por mí misma.


Para buscar sentirme cómoda con mi apariencia sin que me importase no traer ropa llamativa, pues en el pasado si le daba demasiada importancia a mi aspecto, sentía que la ropa era parte de mi cuerpo y personalidad (así como el maquillaje) por ello es que es un reto personal sentirme bien con lo que lleve puesto.


Bueno el caso es que ha funcionado de maravilla, siento que ahora si le doy más importancia a lo que soy por dentro, a como pienso a mis valores, y nada ha interferido con lo que traigo puesto. Por otra parte ha disminuido de manera considerable mi crítica y juicio hacia la apariencia y vestimenta de otras personas, es como si cada vez me fijara menos en eso.


Me he sentido muy cómoda usando la ropa que me queda y combinarla es fácil dado que son colores sólidos y muy pocos, no pierdo tiempo pensando en que ponerme y mi autoestima no se vio afectada por mi apariencia distinta. Es como si todo se juntara, tengo poca ropa, repito la ropa constantemente, me fijo muy poco en ello, deje en gran medida lo superficial, no gasto en ello, critico menos, la comodidad es lo mejor y me siento bien.


Aunado a que no uso maquillaje y no depilo mis axilas, es algo muy liberador, vi de otro modo la famosa “feminidad” porque no siento que sea menos mujer que aquella que usa de todo y con maquillaje o artilugios cambia su aspecto físico, no me sentí incomoda de pensar que otra gente pudiera criticarme, al contrario, el dejar todo eso fuera de mis constantes pensamientos, me dejo tiempo libre para reflexionar sobre ello y sobre como crecemos con este concepto de que ser femenina es cambiar tu apariencia física y siempre lucir como en realidad no eres.


Que felicidad verme al espejo y sentirme hermosa tal cual soy sin ver mi ropa y pensar que es ella la que me hace bella, que bonito que en la calle despierte interés por parte de las personas sin tener nada falso que quitarme.


Ojala las personas se valoraran más y se dieran cuenta que la ropa no debe ser la que te defina y que el maquillaje es opcional que no se necesita toda esa producción para hacer lucir bien a alguien o darle un valor moral, que ya en si tiene.

Conducta femenina y conducta masculina.




Hace un tiempo llevo pensando sobre este tema. Para mi es importante ir avanzando en el pensamiento, abrirme a posibilidades nuevas, esto incluye dejar el pensamiento de “conductas femeninas” son todas estas que nos van ensenando en la cultura, tales como: “pórtate como una dama” que hace referencia a conductas determinadas, que son distintas a las de los varones.


Pienso que la igualdad debe ser el principal motivo de remover toda esta enseñanza de conductas separadas. Nuestro sexo no cambia a lo largo de nuestra vida, siempre seremos hombres o mujeres (sin discriminar a los que son ambos géneros) pero la sociedad marca la diferencia con la educación que se nos da. Antes he hablado de ello y de que me molesta la desigualdad o el machismo y hasta el feminismo. Creo que no deben existir tales posturas, solo la de la igualdad.


He visto que la sociedad conformada por mujeres ha exigido que se cambien leyes para buscar igualdad de derechos pero también he visto manifestaciones de conductas que repruebo totalmente por que caen en lo mismo que el machismo, es decir hacer ver que un determinado sexo es mejor que el otro y que debe y puede aprovecharse de ello.


Eso para mí es totalmente inaceptable. Yo propongo igualdad de oportunidades y esto tiene mucho que ver con la manera en que nos educan. No me parece bien que se tengan diferentes parámetros educacionales para hombres y para mujeres. Los hombres no tienen por qué tener solo las conductas marcadas para ellos, e igualmente con las mujeres.


Me enoja de sobre manera cuando escucho comentarios si un hombre es cuidadoso de su aspecto físico o acicalado, que digan que eso es de mujeres o que le cambia la orientación sexual, o que desvaloriza su condición de hombre. Es totalmente idiota. Creo de manera contundente que no deben existir las conductas propias de un género, estoy segura que son meras invenciones del ser humano en sociedad, son normativas aprendidas.


Lo saco a conclusión de manera empírica, viendo a los niños muy pequeños que al no estar adoctrinados aun (claro que los padres desde muy temprana edad les inculcan estas pendejadas de: “no llores porque eres niño” de “no juegues brusco con la niña porque la vas a lastimar”, o de “tú no puedes jugar brincando porque usas vestido”) son muy libres de expresarse tal cual, y no tienen a mi parecer una conducta de hombre o de mujer, se comportan como seres humanos, es todo.


Así que siendo ya adultos estamos adoctrinados malamente, a solo comportarnos según los cánones inventados para nuestro sexo. Y yo me opongo, debemos comportarnos con valores, con moral y con ética, sin importar que seamos hombres o mujeres.


Toda esa estupidez de conductas que igualmente abarca el ser caballero de lo cual hable anteriormente, me parece que ha llegado a su fin y debemos evolucionar como sociedad. Dejando de imponer estas normas culturales que únicamente crean desacuerdos.


Sé que no es fácil erradicar esta educación que se ha llevado por muchísimo tiempo, pero sé que por algo se empieza, primero que nada dejar de pensar que los niños y niñas deben jugar separadamente, y no los mismos juegos, también dejar atrás todo eso de sentir admiración por conductas de ridícula caballerosidad donde en realidad solo hacen ver que la mujer no es capaz de valerse por si misma y que el hombre tiene el deber de ayudarla. Nada de eso es aplaudible. Hacemos a las mujeres inútiles y que esperen esa ayuda siempre de un hombre.


No me gusta que a las niñas se les prive de vivir una vida normal y se les imponga que deben comportase con ademanes según delicados y discretos porque son mujeres, eso no debe seguir pasando, tenemos que avanzar como personas para cambiar como sociedad, por ello debemos quitar todo eso.


Aun no sé qué tanto debe abarcar, aun pienso en ello, pero considero que es un buen inicio quitar de mi cabeza el decir comportamiento femenino y masculino y comenzar por decir comportamiento humano.

Minimalismo Detox y otras palabras nuevas.




Resulta que en los últimos dos meses he comenzado a pensar que vivir con menos es una muy buena práctica, una cosa fue dejar el materialismo, ese que tanto amaba y en el que todos mis sueños eran sobre posesión de cosas compradas y de estatus.


Pero ahora se trata de tener las menos cosas materiales posibles, no investigo aun todo el concepto, más que nada lo hago por mis principios espirituales, sé que tiene raíces del budismo, pero como reitero aun no hago una investigación sobre esto. Básicamente me he empezado a deshacer de toda mi ropa, dejando únicamente la que si uso, también me prometí no comprar nada durante al menos 6 meses, eso sí me causa un poco de ansiedad, pero en parte lo veo como una desintoxicación del materialismo que la moda te hace tener.


Quiero desprenderme de las cosas materiales, pues según mi propia forma de ver, las cosas no son tan importantes para mi plano espiritual que quiero alcanzar, reconozco que tengo problemas con comprar zapatos, así que por eso mismo quiero forzarme a quitarme eso, también suelo comprar ropa, nada caro, al contrario me encanta la ropa de segunda mano, pero aun así, sé que tengo suficiente.


Para mí todo esto representa llevar a la práctica algo que pienso, que realmente las cosas no dan la felicidad, que son demasiado valoradas, practico este desapego de lo material para ser congruente con mis pensamientos, por ahora ha funcionado bien, hasta eso, regalar la ropa ha sido fácil.


También estoy en un Detox de maquillaje, les cuento, a los 14 años comenzaba a maquillarme, se abrió el mundo de posibilidades para realzar mi atractivo físico y atraer hombres, decidí comprar de todo un poco y ver qué era lo que me gustaba más, lo básico siempre fue base de maquillaje, rubor, labial, delineador y mucho rímel, para mí era sentir que usaba poco maquillaje y que eso ayudaba a verme mejor, así lo hice durante unos 10 años, después decidí usar sombras también y eso hacía que mis ojos se miraran más grandes, luego decidí por un tiempo usar también iluminador para ciertas partes de mi cara. Pasado el tiempo decidí quitar el delineador, pues me di cuenta que me hacía ver más grande de edad, me costó, porque mi imagen cambio, pero lo quite gradualmente y finalmente hace muy poco tiempo, hará un mes, decidí quitar la mayoría de mis maquillajes de mi rostro, ahora solo uso dos, rubor y labial.


Decidí quitar el maquillaje casi por completo porque comencé a pensar que el maquillaje no realza tu físico, en realidad lo cubre, trata de aparentar que eres perfecta o que no tienes defectos y eso no es algo que me guste, aparte de que quise dejar ser a mi piel. El cambio fue rudo y drástico, pero me ha gustado mucho, planeo continuar así.


Como ven, cada vez soy más hippie, primero las creencias, luego la paz, luego la espiritualidad, la comida, el dinero y ahora hasta vivir con muy poco, pero me encanta este camino, para que negarlo.


Espero en este año gradualmente ir quitando cosas de mi vida, literal, y ver como termino el año. Sigo en cambios y eso me hace sentir muy bien, me he planteado la posibilidad de no tener auto, tanto porque contamina como porque es algo de comodidad pero no nací con auto así que puedo vivir sin él. Sobre las propiedades solo he pensado que deseo tener donde vivir, tengo actualmente casa aunque no viva en ella, así que tal vez decida no tener otra propiedad, o tal vez si y la anterior la devuelva a mis padres, la cosa es tener menos.


En los próximos días seguiré deshaciéndome de ropa y calzado para tener lo necesario. También me deshice de accesorios y muchas cremas corporales que a lo largo del tiempo he ido agregando, en parte porque muchas no estoy segura de que sean veganas y también porque realmente no las necesito, irse desprendiendo de las cosas no ha sido tan difícil como yo pensaba, aun considero que tengo un gran guarda ropas, y con el pasar de los días voy quitando prendas.


De lo único que aún no estoy dispuesta a quitar de mi vida, son los libros, tengo muchos y todos los he leído, les tengo cariño a la mayoría de ellos, pues me han enseñado cosas y los encuentro interesantes, a veces vuelvo a leer algunos o los consulto para corroborar hechos. Quisiera poner en práctica esto del minimalismo en mi hogar, pensar en tener pocos muebles me entusiasma, porque debo buscar la forma que los que tenga sirvan para muchas cosas sin tener que adquirí más.